LEAMOS HOY 1 DE DICIEMBRE JEREMÍAS 36
VERSÍCULO PARA MEMORIZAR:
“A medida que Yehudi terminaba de leer tres o cuatro columnas, el rey las cortaba con un estilete de escriba y las echaba al fuego del brasero. Así lo hizo con todo el rollo, hasta que éste se consumió en el fuego. Ni el rey ni los jefes que escucharon todas estas palabras tuvieron temor ni se rasgaron las vestiduras”.
JEREMÍAS 36:23-24
COMENTARIO HISTÓRICO DE JEREMÍAS 36
El episodio de Jeremías 36, sucedió el año 605 a. C., poco después de la victoria de Nabucodonosor sobre el ejército egipcio en Carquemis. Al fin del tercer año del reinado de Joacim, Nabucodonosor alistó un ejército para sitiar y conquistar Jerusalén, la cual tomó a fines del quinto año o principios del sexto. En esta primera conquista, Nabucodonosor, llevó cautivos a Joacim, a Daniel, Sadrac, Misael, Azarías, Ananías, y toda la realeza. Previo a la conquista de Jerusalén, Jeremías escribió un rollo y pidió a Baruc para que lo leyeres el día de la fiesta. Los príncipes llevaron el rollo y leyeron su contenido delante de Joacim, sin embargo, en lugar de arrepentirse y rasgar sus vestidos, cortó el rollo y lo quemó. Analicemos las actitudes que tuvieron otros personajes bíblicos cuando recibieron las amonestaciones divinas:
1) ACTITUD DE DAVID ANTE LA AMONESTACIÓN.- Ante la llamada de atención de parte del profeta Natán, en forma inmediata David exclama: “Pequé contra Jehová” (2 Sam 12:13) y solicita el perdón divino (Sal 51);
2) ACTITUD DE LOS NINIVITAS ANTE LA AMONESTACIÓN.– El rey, junto con toda la población se vistieron de luto, y decretaron tres día de ayuno desde el mayor hasta el menor, incluido hasta los animales (Jon 3:5-8);
3) ACTITUD DE JOSÍAS ANTE LA AMONESTACIÓN.- Cuando Josías oyó las palabras de la Torah, rasgó sus vestidos y buscó el perdón (2 Rey 22:11). ¿Cuál sería nuestra actitud?
CITA SELECTA
“Cuando el hombre ha pecado contra un Dios santo y misericordioso, no puede seguir una conducta más noble que la que consiste en arrepentirse sinceramente y confesar sus errores con lágrimas y amargura en el alma… Pero el rey Joacim y sus señores, en su arrogancia y orgullo, rechazaron la invitación de Dios. La oportunidad que se les ofreció de manera misericordiosa antes que quemaran el rollo sagrado, fue la última”.
(PR 321).
ORACIÓN
DIOS NUESTRO. NO QUEREMOS TENER LA ACTITUD DE JOACIM, QUE DESPRECIÓ LOS LLAMADOS DE AMONESTACIÓN. TE SUPLICAMOS QUE TU SANTO ESPÍRITU, PUEDA ENTERNECER NUESTRA MENTE, PARA ESCUCHAR LAS AMONESTACIONES PARA CAMBIAR NUESTRA VIDA PECAMINOSA. POR JESÚS, AMÉN.