SALMO 102 – 16 AGOSTO 2023

INTERROGANTE: ¿QUÉ HACER CUANDO ESTAMOS ENFERMOS, ANGUSTIADOS Y DESESPERADOS? 


VERSÍCULO PARA MEMORIZAR:

“Escucha, Señor, mi oración;

llegue a ti mi clamor.

No escondas de mí tu rostro cuando me encuentro angustiado.

Inclina a mí tu oído;

respóndeme pronto cuando te llame”.

SALMO 102:1, 2


COMENTARIO HISTÓRICO DE SALMOS 102

Este salmo se titula: “oración de un afligido”. El autor cree que está a punto de desfallecer, por esa razón, da rienda suelta a su “lamento ante el Señor”. El salmista describe los sufrimientos que está atravesando: angustia, fiebre, debilidad, extenuación, insomnio, opresión, luto y desfallecimiento. Este salmo es muy apropiado repetirlo cuando estemos atravesando por circunstancias difíciles. Tal vez algunos nos preguntemos: “¿Debo contarle a Dios todo lo que estoy sufriendo?” Sí, recordemos que los salmos nos enseñan a orar, este salmo nos muestra que el creyente que sufre puede exponer todos sus sufrimientos delante de Dios.

Pidamos en oración: ESCUCHA MI SÚPLICA Y CLAMOR. ¿Estamos pasando por alguna dificultad o problema que no tenemos ninguna solución humana para resolverlo? Oremos y clamemos con más intensidad para poder ver el actuar de Dios en nuestro favor.

Expresemos a Dios: ESTOY ANGUSTIADO. El apóstol San Pablo expresa: Nos vemos atribulados en todo, pero no abatidos; perplejos, pero no desesperados; perseguidos, pero no abandonados; derribados, pero no destruidos” (2 Cor 4:8, 9).

CITA SELECTA

“Dios responde por cada promesa y con nada podemos deshonrarle más que con dudar y vacilar, con pedir y no creer, y más tarde con dar expresión a la duda. Si no recibís inmediatamente lo que pedís, ¿habéis de andar enfadados y de ser incrédulos? Creed, creed que Dios hará lo que ha prometido. Sigan ascendiendo vuestras oraciones y velad, trabajad y esperad. Pelead la buena batalla de la fe. Decid a vuestro corazón: “Dios me ha invitado a venir a él. Ha oído mi oración. Ha empeñado su palabra prometiendo recibirme y él cumplirá su promesa. Puedo confiar en Dios, porque de tal manera me amó que dio a su Hijo unigénito para que muriese por mí.”

LA EDUCACIÓN CRISTIANA, P. 424

OREMOS:

PADRE, GRACIAS POR ESCUCHAR NUESTRAS ORACIONES Y DARNOS LA SEGURIDAD QUE SON CONTESTADAS. INTERCEDEMOS POR NUESTROS HERMANOS, AMIGOS Y FAMILIARES QUE ESTÁN SOPORTANDO DIVERSAS DIFICULTADES, QUE TU GRACIA LOS SOSTENGA. POR JESÚS, AMÉN.

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Scroll al inicio